Por Agustín Arechavala.
El Gobierno Nacional deja sin efecto un impuesto sobre las Pick-Up, que fueron consideradas bienes de suntuarios.
En tierras donde reina Toyota Hilux, herramienta de trabajo predilecta de los argentinos dentro y fuera del sector agropecuario, el Gobierno de Alberto Fernández sancionó en 2019 la Ley Nº 27.541 de Solidaridad Social y Reactivación Productiva en el Marco de la Emergencia Pública, que incorporó el denominado “Impuesto Para una Argentina Inclusiva y Solidaria (PAÍS)”.
El “Impuesto PAIS” estableció con carácter de emergencia, por el término de cinco (5) períodos fiscales, una contribución que se aplicará en toda operación de compra de billetes y divisas en moneda extranjera, o para el pago de importaciones de determinados bienes considerados “suntuarios” como lo son las camionetas.
A pesar de la necesidad recaudatoria, el Gobierno Nacional da marcha atrás con todo ello, dado que ahora considera que las Pick Up, son herramientas trabajo indispensables y preferidas en muchos sectores productivos de la economía argentina.
En este contexto, es que se dictó el Decreto 58/2023 del Presidente de la Nación, por el cual suspende el pago del impuesto país para la adquisición de camionetas pick up, furgonetas, furgones o camiones rígidos.
Dentro de sus fundamentos, se ha establecido que en la clasificación de bienes de lujo realizada en la normativa anterior se incluyeron equivocadamente vehículos que, por su configuración, no están concebidos para otro uso que no sea el de transporte de mercancías.
A raíz de ello, se ha decretado “suspender por tiempo indefinido el referido impuesto para aquellos vehículos comprendidos en las categorías camionetas pick up, furgonetas, furgones o camiones rígidos, diseñados para un máximo de tres pasajeros, en la misma línea, incluido el conductor, independientemente de su valor”.